lunes, 25 de junio de 2012

23 de Junio de 2012: Trail del Peñalara 60Km


Datos:

Carrera: Trail del Peñalara 60Km
Web: http://www.grantrail.es
Fecha: 23 de Junio de 2012
Lugar: Navacerrada, Madrid
Distancia: 60 Kms
Desnivel: 2500m d+


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Llevaba un par de años dándole vueltas a la idea de hacer una carrera de montaña de más de 42kms, por superar la máxima distancia que había corrido hasta ahora en los tres maratones de montaña que he hecho. El problema es que la oferta de este tipo de carreras, suele pasar de los 42kms a los ultras muy “ultras”, de 100kms o más, y siendo consciente de mis limitaciones a la hora de sacar tiempo para entrenar, esos ultras se quedaban fuera de mi alcance.

Por eso otros años había pensado en hacer la MIM (Maratón y Media) de Castellón, que son unos 60kms, con 2800m de desnivel positivos y 1500m negativos. Es un palizón, pero asumible y sin tener que pasar la noche corriendo.

Pero por una cosa o por otra nunca llegué a apuntarme…

Sin embargo este año cuando me enteré de que el club Peñalara estrenaba modalidad de 60kms y 2500m de desnivel positivo y otros tantos negativos, como “hermana pequeña” del Gran Trail del Peñalara de 110kms y el Trail de 80kms, no me lo pensé dos veces, y cuando salieron las inscripciones no tardé en apuntarme a principios de este año 2012.

Era mi gran objetivo de este año o al menos el que más ilusión me hacía, aunque este año he estado entrenando principalmente para poder terminar el triatlón olímpico. Quizás gracias al entrenamiento del triatlón finalmente he podido hacer esta carrera, ya que aunque no he hecho un solo entrenamiento por montaña, ni de más de 15 kilómetros corriendo aunque sea por el parque, sí que he entrenado una media de más de 4 horas a la semana entre bici, nadar y correr, y quieras que no, eso me ha dado fondo.

El caso es que finalmente no pude preparar específicamente el trail, ya que hice el tri olímpico cuatro semanas antes, dejándome una semana de descanso post-triatlón, dos semanas de unos 45kms de carrera por el Juan Carlos I, y la última semana de descanso pre-carrera.

Por ello, esta carrera era toda una incógnita para mi… ¿Acabaría? ¿En cuánto tiempo? ¿Aguantarían mis piernas 60kms por el monte? En mis mejores pronósticos, pensaba en terminar en unas 10 horas, y calculaba que lo normal serían unas 12 horas… y es curioso, poque ahora que lo pienso, creo que nunca me planteé realmente la posibilidad de que no la fuese a terminar.

Y por fin llegó el gran día, con una predicción de una ola de calor con más de 30 grados en la sierra…

Me levanté a las 4:30h de la mañana, curiosamente no me hizo falta ni despertador J

A las 5:00h cogí el coche hacia Navacerrada, con el cuerpo roto de sueño para llegar al pueblo a eso de las 6:00h, justo a tiempo para ver cómo salían los del Gran Trail, todavía de noche con los frontales encendidos… ¡¡qué valor!!

Recogí el dorsal y el chip en el Polideportivo de Navacerrada y me volví al coche para prepararme y terminar de desayunar un batido y unos croissants que me había llevado.

A las 7:15h salimos en autobús hacia Rascafría, donde comenzaba nuestro trail de 60kms. Llegamos con tiempo de sobra, así que me tomé un café en el único bar abierto, con el buen hombre del bar agobiado por tanto tío vestido con mallas pidiéndole café a la vez J




La salida era a las 9:00h, aunque se retrasó hasta las 9:11h porque al parecer había una carrera de caballos que salía desde Rascafría a la misma hora.

Comenzamos todos trotando a buen ritmo, hasta que comienzan las cuestas de la subida al puerto del Reventón donde la mayoría cambiamos el trote por el andar rápido. Fue una subida de unos 10kms, más tendida de lo que me esperaba, pero preferí andar que correr incluso en los tramos más fáciles por reservar fuerzas. El primer avituallamiento estaba poco antes de llegar al puerto, donde bebí y comí unas almendras y una barrita. Es muy importante recargar bien de agua en este punto, ya que no volvía a haber otro avituallamiento en 18kms, y hubo mucha gente que con el calor lo pasó mal por falta de agua antes de llegar al siguiente avituallamiento.

El primer control estaba justo en el puerto del Reventón, un poco más adelante. Hasta ahí iba con una media de poco más de 9min/km, lo cual significaba traducido a 60kms terminar en poco más de 9 horas… ¡bien!
A partir del primer control, se seguía toda la cresta en un sube-baja, hasta llegar a la cresta de claveles, que se pasaba por un lado. La cresta de claveles muy divertida por tener que saltar de roca en roca, pero como hay que ir con cuidado te quita bastante tiempo.

Llegué a la cumbre del Peñalara, donde estaba el segundo control, con un ritmo medio de 10min/km (10 horas para los 60kms) lo cual no estaba nada mal.

Desde la cumbre del Peñalara, de cabeza hacia la Granja! Bajamos por el mismo recorrido que conocía de la Media de la Sierra de Segovia, una bajada de lo más dura, sin camino y entre piedra suelta. Ya más abajo cogimos senda para bajar entre praderas y luego pinares en un camino precioso y muy muy rápido hasta la Granja. En este tramo hice bajadas que me parecía que iba a mil por hora, y cuando miraba el gps me sorprendía porque iba a 5:30min/km, je, je…

Llegué a la Granja muy bien, sin molestias y bastante bien de fuerzas, con un ritmo medio de 9min/km. Es curioso, mi primera carrera de montaña fue precisamente la Media de la Sierra de Segovia que salía de la Granja, llegaba al Peñalara y volvía a la Granja, en total 21kms. En aquella ocasión llegué totalmente reventado, y esta vez, llevando ya casi 30kms encima estaba bastante entero…

En este punto teníamos el avituallamiento fuerte de la carrera, con un poco de todo. Allí me senté un rato, comí un pequeño plato de ensalada de pasta, un poco de embutido, acuarius, agua, rellené agua en la mochila y en el bote que llevaba y de nuevo en marcha.

El siguiente avituallamiento estaba en el km 40, hasta allí, una ruta muy bonita por el valle de Asiaín, al lado de un arroyo con pozas, entre bosques, y por una camino bastante llano corrible 100%, lo cual no quiere decir que lo hiciese corriendo, je, je. En este tramo coincidí la mayor parte del tiempo con otro corredor muy majete con quien fui charlando un buen rato, casi todo el camino andando pero a muy buen ritmo.

Precisamente con este corredor comentamos que no teníamos ni idea de cómo íbamos de posición dentro de la carrera. A estas alturas ya estábamos todos muy desperdigados y era fácil pasarte varios kilómetros sin ver a otro corredor. Cuando por fin llegamos al km 40, en el avituallamiento preguntamos cómo íbamos, y ¡sorpresa! resulta que estábamos entre los 20 primeros! Alucinante, nunca había estado tan adelante en una carrera de éstas… también es verdad que al correrse en paralelo las de 110km y 80km, los “maquinas” se irían todos a correr las hermanas mayores, pero aun así, me hizo mucha ilusión.

En el avituallamiento del km40 salí antes que mi compañero de los últimos kilómetros y ya no le volví a ver hasta meta.

Yo seguí a buen ritmo andando y trotando hasta llegar al MURO de la Fuenfría en el km 42… ya había oído hablar de él, pero pensé que no iba a ser para tanto… y vaya si lo fue! Un cuestón de más de un kilómetro que con el calor que hacía, a las tres de la tarde, y después de llevar ya un maratón y casi 2000m de desnivel en las piernas, se me hizo realmente duro!

Pero poco a poco, lo conseguí subir, parando en las pocas sombras que había para beber algo.
Justo al terminar está la fuente de la Fuenfría, donde también había un control. Aproveché para rellenar el bote de agua fresquita, mojar la gorra y continuar por el camino Schmith.

Todo ese tramo lo hice sin ver a ningún otro corredor, trotando a ratos, hasta llegar al puerto de Navacerrada en el km 50, donde había otro control y avituallamiento. En los avituallamientos siempre nos juntábamos unos cuantos corredores, y en éste había alguno que parecía que estaba sufriendo bastante.

A partir del puerto de Navacerrada se subía un último repecho en el cual me adelantó otro corredor que iba de lo más fresco. Me dijo que había ido acompañando a un compañero que iba mal durante un buen trecho y ahora iba muy bien de fuerzas.

Por último, la bajada por sendero un poco complicadillo, que poco a poco se iba convirtiendo en camino donde poder correr un poco mejor, para al final enlazar con la pista que baja a la Barranca. Allí un último control y seguí por la pista de bajada, corriendo sin parar a unos ritmos de 5:30min/km que no pensaba que pudiese llevar después de tantos kilómetros.

Por fin la entrada en el pueblo de Navacerrada, que al ir totalmente solo, casi me despisto y me meto por otro lado. Fue el kilómetro más largo de toda la carrera, el último a través del pueblo… y eso que todo el pueblo según pasaba se ponía a aplaudir y a animar, una pasada.

Y ya estaba allí, el campo de fútbol, la meta, en 9h 13min!!! Increíble!! Lo había conseguido!! Y no sólo eso, había entrado en un tiempo mucho mejor del que me había atrevido a soñar, sin molestias y en el puesto 17!!

Avituallamiento final, acuarius, cocacola, sandía, plátano… y justo llegan Magdalena y los peques. Una pena, por sólo 10 minutos no han llegado a tiempo de verme entrar en meta. Culpa mía por ir tan rápido, je, je.

Ahí según fui a saludarles me dio un mareo que no me tenía en pie, tuve que estar un buen rato tirado en el césped tranquilo, me tomé otro acuarius, y cuando me recuperé un poco fui a darme una ducha en el polideportivo, a paso de tortuga porque no podía dar un paso normal entre el bajón de tensión y lo cargadas que llevaba las piernas.

Al final, como he comentado, puesto 17, pero además es que los puestos del 11 al 17 entramos en un intervalo de únicamente 10 minutos. El siguiente corredor, el 18, llegó 20 minutos después de mí.

Por último comentar que la organización fue estupenda, los voluntarios una verdadera pasada, siempre con una sonrisa y unas palabras de ánimo en cada momento. Los avituallamientos muy bien también, aunque hay que tener cuidado de coger agua suficiente desde el puerto del reventón hasta la Granja, ya que son 18kms. Las balizas perfectas, no me perdí en ningún momento, y eso que gran parte la hice sin referencias de corredores a la vista y yo me pierdo siempre! J

Del equipo obligatorio que había que llevar (mochila con frontal, venda, chubasquero, luz trasera,…) por suerte no tuve que usar gran cosa, pero es cierto que con el día de calor que hizo, fue fundamental llevar un buen depósito de agua y crema solar. El resto, aunque contento por no tener que usarlo, mejor llevarlo por si las moscas…