martes, 30 de julio de 2013

28 de Julio de 2013: Challenge Vitoria


Datos:

Carrera: Challenge Vitoria
Tipo: Triatlón distancia Ironman
Lugar: Vitoria
Distancia: 3800m nado, 180kms bici, 42kms carrera
Tiempos: DNF
Agua: 1h 21 min
T1: 8 min
Bici: 6h 38min
T2: 5min
Carrera:
Fecha: 28 de Julio de 2013 a las 8h
Puesto: DNF
Tracks:
Agua:  Natación
Bici:  Bicicleta
Carrera:  Maraton




Comentarios:

Bueno, finalmente no pudo ser… me he quedado a 9kms de ser finisher en un Ironman, pero como la experiencia merece la pena, y de los fracasos se aprende igual o más que de las victorias, creo que merece la pena la crónica.

La semana anterior al Challenge fue bastante dura, por la situación en el curro, y por los nervios de la proximidad del Ironman. En todo el año no había tenido tantos achaques, algunos seguro que de cabeza y otros puramente físicos pero provocados seguramente por los nervios.

El domingo anterior, después de la última salida larga en bici de 105kms a casi 30kms/h, ajusté la potencia de la bici que llevaba algo suelta y me cargué uno de los tornillos, quedándose dentro la mitad del tornillo… menos mal que fue una semana antes y pude llevarla al taller donde sacaron el tornillo roto y me pusieron uno nuevo.

El martes me dio un fuerte dolor en el pecho, una especie de tirón interno, que hacía que me doliese bastante al respirar y hasta al girarme… el dolor me duró hasta el mismo sábado antes del Challenge, aunque por suerte fue remitiendo poco a poco y el domingo por la mañana ya no me dolió.

Luego tuve diversos dolores en la rodilla, pero supongo que éstos si que fueron más paranoia que otra cosa…

Por fin llegó el viernes, cargamos la bici en el coche junto con las maletas para el fin de semana y la mochila de triatlón con todos los trastos y nos fuimos con los peques directos a Vitoria. Tras el atascazo del siglo, llegamos a eso de las 21h al apartamento que alquilamos, dejamos las cosas y nos bajamos a cenar a una de las muchas tabernas que hay en Vitoria.

El sábado fuimos a la zona de meta, en Plaza España, donde había que hacer el registro y recoger los dorsales. De regalo daban una mochila Challenge. A las 10:30h fui yo solo a la reunión técnica mientras Magdalena se daba un paseo con los peques. Siempre está bien ir a la reunión técnica, aunque ya me sabía de memoria todos los detalles siempre te aclaran muchas dudas.

Para comer nos fuimos a un italiano a cargar de hidratos y por la tarde primero me acerqué a la T2 que estaba en zona de meta, para dejar la bolsa con las cosas de la carrera y luego nos fuimos todos en el coche hasta Landa, al pantano donde se nadaba y estaba la T1 a dejar la bici, pasar el control de material y desinfectar el neopreno para evitar el contaminar el lago con el mejillón tigre, una especie que se come a la autóctona.

Cenamos en una taberna de pinchos de nuevo, y a las 22h me metí en la cama para intentar descansar, aunque con los nervios me desperté varias veces por la noche, y al final me levanté a las 5h sin que llegase a sonar el despertador.

Desayuné fuerte, un huevo cocido, plátano, bizcochos, café con leche, cogí las cosas y me fui andando yo solo hasta el hotel oficial más cercano desde donde salían los autobuses de la organización a las 6h hacia la salida. Era curioso ir preparado para hacer un Ironman caminando por las calles llenas de gente en los bares, de juerga…

Una vez en la salida, me sobró un montón de tiempo, llegamos a las 6:30h, y hasta las 8:10h no era mi salida, y como yo lo tenía todo listo del día anterior estuve paseando por allí haciendo tiempo, hasta que me puse el neopreno, cogí las gafas zoogs predator polarizadas que me había dejado Jesús y el gorro de natación que te da la organización. El agua estaba a 22 grados, justo en el límite para permitir el neopreno.

Justo después de dejar la mochila en el ropero a falta de 5 minutos de la cámara de llamadas, de repente me di cuenta que las gafas de nadar que llevaba en las manos ya no las tenía!!!! Con los nervios se me debieron de caer en el camino del ropero a la T1… así que corriendo de vuelta al ropero buscando por el suelo a ver si las veía, que no las vi, y al final pude coger mi mochila y coger otras gafas que tenía por si acaso… menos mal, nadar 3800m sin gafas no me hubiese hecho ninguna gracia.

La cámara de llamadas era cada uno delante de su bici, y por grupos nos iban llamando para ir a la salida. Con la música de Challenge a todo volumen, el momento es de lo más emocionante… me impresionó ver a un triatleta, el doble que yo de grande, llorando de emoción…

Primero salieron los élite masculinos, luego élite femenina y luego mi grupo de edad… yo no quería jaleos, así que salí atrás y abierto a la derecha. Había que nadar 1400m para luego torcer 90 grados, otros 700m, giro y 300m, giro y 300m y acabar con 1100m hasta T1. Es decir, un circuito en forma de “L”. El entorno de la natación alucinante, un pantano precioso.

Nada más empezar se me metió agua en las gafas, pero me las volví a colocar y no me volvieron a dar problemas. Nadé con el garmin 310xt en el gorro para que cogiese bien la señal y en la muñeca llevaba un cronómetro por ir entreteniéndome viendo el tiempo que llevaba.

Era la primera vez que hacía 3800m seguidos y encima en aguas abiertas, y la verdad es que acabé muy contento, sin dolores, sin tirones, y acabando fuerte. Me salieron 4100m de gps, supongo que por las desviaciones sobre la línea recta, y un total de 1h 21min, es decir, a un ritmo de 2min/100m, justo cumpliendo mis mejores previsiones J

La T1 me la tomé con calma, cogí la bolsa de la bici y me fui a la carpa para cambiarme, aunque para mi sorpresa, la carpa estaba totalmente abierta, así que me tocó despelotarme delante de todo el público. La toalla se me había olvidado en la bolsa que dejé en el ropero así que no me pude secar, con lo que me costó meterme el maillot. Cuando lo conseguí, y me fui a poner el culotte, me di cuenta que como el culotte llevaba tirantes, no me tenía que haber puesto antes el maillot, pero con lo que me había costado, dejé los tirantes colgando, aunque con miedo de que el culotte me rozase. Tardé unos 8 minutos en la transición, algo también dentro de lo previsto con el cambio total de ropa y sin estresarme.

El recorrido de bici eran 2 vueltas completas a un circuito alrededor del pantano y de los pueblos de la “llanura” alavesa y una tercera vuelta acabando en Vitoria. El recorrido también es espectacular, superbonito. Lo de llanura lo he puesto entre comillas porque aunque es cierto que no hay ningún puerto, el recorrido está lleno de toboganes con un sube-baja constante. Hay un repecho un poco más fuerte llegando a la presa del pantano, por donde se pasaba dos veces.

En este segmento lo peor fue el viento, que además fue aumentando con el día, de forma que ya en la segunda vuelta, del kilómetro 90 al 115 soplaba en contra y lo hacía muy duro. Igualmente en la tercera vuelta, del km 150 hasta el 170…

Fui comiendo y bebiendo toda la bici, barritas, geles y las dos medias lunas con jamón york y queso que llevaba preparadas. Hacia el kilómetro 150 se me cerró un poco el estómago, pero dejé de comer durante un rato, y antes de acabar me volví a tomar una barrita que me sentó bien.

Magdalena y los peques se pegaron la paliza de ir al circuito de bici y pude saludarlos en el kilómetro 120 más o menos. Luego se movieron a otro punto de la bici pero ahí había pasado yo justo, así que se fueron de vuelta a Vitoria a verme en la carrera.

Al final me salieron 182kms según el gps, hasta la T2, donde dejabas la bici a un voluntario, y esta vez si, entrabas en una carpa cerrada, donde me volví a cambiar entero, poniéndome las mallas de correr y el top del amigo Ramón y su proyecto IM4EM (Ironman para la Esclerosis Múltiple)

Este proyecto y Ramón en sí mismo, son dignos de admiración. Este tío, con EM, se está preparando el Challenge de Calella distancia Ironman, con su proyecto solidario para animar a todos los afectados de EM a afrontar la enfermedad y la vida como lo hace él, con mucho valor, mucha fuerza, y por si fuera poco, siempre con una sonrisa en la boca.

Empecé la maratón con la incógnita de si tendría piernas para hacerla, y la verdad es que me encontré muy bien corriendo. Tanto que tenía que ir controlando el ritmo en el gps para no pasarme. Iba andando solo en los avituallamientos para beber agua, coca cola, y tomar algo de melón. Los geles nada más verlos se me cerraba el estómago, y sinceramente creo que aquí estuvo mi gran error y lo que me privó de la medalla de finisher.

El circuito de la carrera eran 4 vueltas de 10,5 kms por Vitoria, una vez más en un recorrido espectacular, pasando cada vuelta por la Plaza España, al lado de la meta, y con un público alucinante, animándote por tu nombre a cada paso (llevas escrito tu nombre en el dorsal) y dándote fuerzas. El paso por Plaza España es especialmente espectacular, con la gente volcándose, gritándote, golpeando las vallas… realmente impresionante!!!

Además estaban también Magdalena y los peques que según salí a correr no pude verles, pero al acabar la primera vuelta si que les vi animándome a tope.

Hice los primeros 21kms en 2 horas, justo cumpliendo mis previsiones más optimistas y sintiéndome muy bien. Lo malo comenzó a partir del km 25… me empecé a “vaciar” hasta el punto que no pude seguir corriendo y me tuve que echar a andar. No  porque tuviese calambres, o las piernas me doliesen, simplemente no tenía fuelle. El estómago también se me cerraba cada vez más y me resultaba difícil hasta tomar la coca cola en los avituallamientos.

Conseguí completar la tercera vuelta andando y llegué a zona de meta donde vi a Magdalena y los peques que estaban allí animándome. Le dije que estaba mal y que iba andando, aunque el paso Plaza España con los ánimos, lo hice corriendo.

Comencé la cuarta y última vuelta, andando y pensando en que los 10kms que me quedaban, a un ritmo de 9min/kms andando, tardaría hora y media. Me daba tiempo de sobra para entrar dentro de los tiempos de corte. Es gracioso porque en ese momento pensaba que lo malo es que haría esperar a Magdalena y los peques para cenar…

Pero el bajón fue a más, y en el km 33 me encontré un puesto con dos sanitarios que me preguntaron si estaba bien, y ante la sensación de angustia en el estómago, y la cabeza que ya se me iba, pensé que así no podía seguir durante más de una hora, así que me dirigí a los sanitarios y les dije que me retiraba.

Después de 12 horas de carrera, 4kms en el agua, 182 kms en la bici y 33 kms corriendo, a falta de solo 9 kms de llegar a meta y cumplir con el objetivo de meses de entrenamiento, me retiré.

Según escribo esto, todavía recuerdo las sensaciones de mi cuerpo en el momento de retirarme, y estoy convencido de que hice bien. Si hubiese seguido en ese momento, igualmente no habría acabado y me podría haber hecho daño. Pero estoy seguro que en una semana se me habrán olvidado esas sensaciones que me gritaba mi propio cuerpo y que me comeré la cabeza (más aún) pensando en que solo con andar un rato más habría sido ironman finisher.

En el puesto de los sanitarios me dio una arcada, aunque no vomité, y me empecé a marear, con lo cual llamaron a una ambulancia que me trasladó al puesto médico de meta, donde me pusieron una vía con suero y glucosa que me dejó como nuevo.

Conseguí avisar a Magdalena con el teléfono de la novia de otro triatleta que estaba en la camilla de al lado, y se vino con los peques. En media hora estaba recuperado y pude ir a por las cosas y la bici.

Le he dado muchas vueltas a qué hice mal, o qué falló para que no pudiese acabar. Es curioso, porque esa misma noche estaba bien, pero es que al día siguiente sólo tenía algo cargadas las piernas, sin agujetas, y podía subir y bajar escaleras perfectamente, llevar maletas, lo que fuese. No he tenido dolores ni musculares ni de articulaciones…

Es decir, sinceramente pienso que físicamente iba bien preparado para acabar. Lo que me falló fue la alimentación en la maratón. Creo que mi gran fallo fue no tomarme ningún gel en la carrera que me mantuviese los niveles de glúcidos suficientes para acabar. En ese momento no fui capaz de tomarme ni un gel. De hecho en el primer avituallamiento cogí uno, me lo guardé, y acabé tirándolo 10kms más adelante porque pensaba que me iba a sentar mal al estómago, pero creo que me tenía que haber arriesgado y tomarme el gel, aunque fuese poco a poco…

En fin, otra vez será… o no… quién sabe.

Lo que si agradecí en todo momento fueron el apoyo y los ánimos de Magdalena, que me aguantó estoicamente durante el viernes y el sábado con toda mi tensión y el mal humor que se me ponía por los nervios. Y que durante todo el domingo se pegó la paliza de ir con los peques de un lado a otro para animarme… y después de la carrera recogió los pedacitos de mi orgullo para ayudar a reconstruirlo.


También agradecí un montón el apoyo de todos los amigos que sabían dónde estaba metido, en especial de la grupeta Alameda, que me hicieron seguimiento y dieron apoyo en todo momento…

miércoles, 17 de julio de 2013

17 de Julio de 2013: Previo al Challenge Vitoria

No suelo escribir nada fuera de las crónicas de las carreras, pero dada la importancia del gran evento que se avecina, creo que merece la pena hacer un “previo” a la carrera en esta ocasión.

Quedan 11 días para el Challenge Vitoria, mi gran objetivo para este año. La prueba es el 28 de Julio del 2013, así que no queda nada de nada. Parece que fue ayer cuando me apunté el primer día que salieron las inscripciones, allá por Noviembre del año pasado. Recuerdo perfectamente lo nervioso que me puse solo con apuntarme.

Elegí el Challenge Vitoria como objetivo de este 2013 porque siempre me ha motivado plantearme retos cada vez más difíciles, y después de acabar muy entero mi primer medio IM, el de Cabo de Gata en Octubre del 2012, parecía que el siguiente reto tenía que ser conseguir terminar un Ironman completo.

Estuve mirando de apuntarme al Iberman en Huelva, o al Pinar Grande en Soria, pero los dos eran primera edición con organizadores no muy conocidos, y bastante tengo con debutar en la distancia como para depender de posibles fallos de primeras ediciones. Ironman Lanzarote también lo descarté, por la dureza de los circuitos y por tener que desplazarme en avión con la consiguiente logística necesaria. Estaba Calella en Barcelona, de Challenge, pero cuando anunciaron que Challenge iba a hacer distancia Ironman en Vitoria este año, después del Campeonato Mundial de Larga Distancia del año pasado, vi que era el que más me cuadraba, tanto por facilidad de acceso (puedo ir cómodamente en coche desde Madrid el fin de semana) como por garantías de organización, ya que Challenge como gran competencia de Ironman, es de los organizadores con mejor fama en estos eventos.

Aunque me ilusionaba el intentar hacer un triatlón distancia Ironman, por otro lado las incertidumbres eran muchas… para poder terminar algo así, hacen falta muchas horas de entrenamientos, mucha fuerza de voluntad y mucha suerte… las dos últimas me suelen acompañar, la primera no tanto.

Trabajando de 9 a 19h sin flexibilidad horaria, con una familia estupenda con la que me gusta pasar el mayor tiempo posible, pocas horas quedan en la semana para entrenar. Hice un cálculo rápido, y quizás un poco tonto, pero que me dio la confianza necesaria para intentar el reto: Acabé el Medio de Cabo de Gata con una media de entrenos semanales de 4 horas. Aprovechando todos los mediodías para ir a nadar y algún día a correr, haciendo salidas largas de correr y bici el fin de semana, podría sacar entre 7 y 8 horas semanales. Aun siendo poquísimas horas para entrenar un Ironman, me autoconvencí que si con 4 horas a la semana había acabado bien un Medio, con 8 horas podría acabar, aunque fuese sufriendo, uno completo…

Al final me han salido 7:20h de media semanal, así que el próximo 28 comprobaré si las hipótesis iniciales eran correctas.

Lo que está claro es que el grado de incertidumbre es muy alto, y no voy para nada sobrado. Pueden pasar mil cosas en cualquiera de los tres segmentos, pero a día de hoy siento la suficiente confianza como para pensar que puedo terminarlo, sobre todo por las sensaciones de los dos Medios Ironman que he hecho como preparación esta temporada.

He ido apuntando todos los entrenos en triatleta.es y los totales de los entrenos esta temporada, desde el 26/11/2012 hasta ahora han sido:

Natación: 181 kms en 88 sesiones, con una media por sesión de 2.06 kms

Bici: 3236 kms en 59 sesiones con una media por sesión de 54,9 kms y varias tiradas de más de 100 kms, aunque ninguna por encima de 130 kms.

Carrera: 593 kms en 58 sesiones con una media por sesión de 10.2 kms. Las tiradas más largas han sido de 21 kms.

Media semanal: 7h 20min

Entrenos medios semanales: 6

Dentro de estas cifras están también las competiciones que he hecho de preparación (Triatlón Fuente Alamo, Ecotrimad, Astromad Olímpico, Half ICAN Valladolid)

Otro tema fundamental es la alimentación durante la competición. El avituallamiento oficial de Challenge Vitoria es de Infisport y durante esta temporada he estado probando los geles y el ND3, y la verdad es que me van bien. Las barritas no las he probado, aunque por suerte nunca he tenido problemas con ninguna. De todas formas me llevaré unas cuantas de Isostar que son las que he tomado últimamente en la bici entrenando. Mi idea es llevar un par de medias lunas con queso filadelfia y jamon york, que también he probado y me va bien para quitarme tanto dulzor de los geles y las barritas. He leído por ahí que debería tomar como 7 barritas en la bici, aunque no sé si seré capaz de tomar tantas. En el Half ICAN no conseguí meterme más de dos. Con los geles tengo menos problemas y hay gente que solo toma geles, así que espero que me valga. Llevaré dos bidones de partida, todavía no sé si los dos con ND3 o uno con agua y otro con ND3. El avituallamiento que dan es de agua y aquarius.

El tema de la ropa también lo tengo más o menos pensado. Finalmente iré con bañador y neopreno en el agua, con culotte ciclista de tirantes y maillot en la bici, y en la carrera con mallas y un top de triatlón del amigo Ramón Arroyo para apoyar su proyecto de IM4EM. Esto supone cambiarme totalmente de ropa en las dos transiciones, pero no veo otra alternativa, ya que en la bici para hacer los 180kms creo que debo llevar buena badana y no me vale con la de un tritraje.

Respecto a mis pronósticos para el Challenge, en el agua, si consigo aguantar y no agobiarme, debería estar en 1h 20min. El circuito de la bici es bastante llano, pero nunca he hecho 180kms, así que tampoco sé cómo los aguantaré. Debería estar entre 28km/h y 30Km/h, es decir, entre 6h y 6:30h más o menos. Y corriendo… buf, sólo de pensar en hacer la maratón después de bajarme de la bici me echo a temblar. Si todo fuese bien, debería intentar ir a unos ritmos de 5:30minkm-5:45minkm para no pasar de 4 horas y que no se me haga eterno.

Es decir, si todo fuese rodado, contando transiciones, podría andar por las 12 horas.


Ahora sólo falta que se cumplan los pronósticos, y no me dé ningún tirón ni agobio en el agua, que no me duela la rodilla en la bici, que no pinche, que me aguanten las piernas y el estómago corriendo… casi nada! J

lunes, 8 de julio de 2013

6 de Julio de 2013: Half ICAN Valladolid

Datos:

Carrera: Half ICAN Valladolid 2013
Tipo: Triatlón
Lugar: Valladolid
Distancia: 1900m nado, 90kms bici, 21kms carrera
Tiempos: Total 5h 43min
Agua: 38 min
T1: 5:30min
Bici: 3h 3min
T2: 2:35min
Carrera: 1h 54min
Fecha: 6 de Julio de 2013 a las 17h
Puesto: 97 de 193 de la general
Tracks:
Agua: Track
Bici: Track
Carrera: Track





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El segundo Medio IM de esta temporada, a falta de únicamente 3 semanas para el Challenge Vitoria.

La fecha era un poco justo, pero finalmente me apunté pensando en tomármelo como un entrenamiento, sin forzar, y aprovechando para ver sensaciones de cara al Challenge.

Al ser en Valladolid, la logística para nosotros era bastante sencilla, ya que podíamos dormir en Palencia, en casa de mis padres, y mi hermano también vive en Valladolid.

La prueba era el sábado por la tarde, lo cual no es muy normal, y menos en estas distancias. Por un lado viene bien el no tener que madrugar, por otro quizás se haga el día un poco largo esperando el comienzo.

ICAN organiza varios triatlones en España y ahora incluso uno en Alemania, y se anuncian siempre como que cuidan especialmente a los triatletas y sus acompañantes (también son especialmente caros). De hecho, compañeros que habían hecho la primera edición del half ICAN de Valladolid el año pasado me habían hablado muy bien, en cuanto a avituallamientos y organización.

Pues bien, este año no sé qué les ha pasado, pero para mí, ha sido de lo peor en organización en los tris que llevo hechos. Ya la salida fue un poco desastre, retrasándose 20 minutos, pero lo peor fue en los avituallamientos de la bici, según llegamos al primero tiré mi bidón para coger uno del avituallamiento con la sorpresa que al llegar se les habían acabado los bidones! Cómo se pueden agotar los bidones?? Los voluntarios poniendo todo de su parte para recuperar los bidones que habíamos tirado para rellenarlos, pero mientras todos parados en el avituallamiento… En el segundo y tercer avituallamiento de bici no les quedaban ni bidones ni sales, como mucho te daban un bidón que habían recogido de los que habían tirado otros triatletas y que habían rellenado con agua… totalmente antihigiénico!

Por último, anuncian una zona postcarrera de lo mejorcito, y la verdad, estuvo mil veces mejor la del Astromad o el Ecotrimad… para recoger las bolsas del ropero también tuve problemas porque no encontraban mis bolsas, menos mal que al final las localizaron, pero ¿cómo se puede tener ese descontrol?

En fin, el triatlón en si mismo, estuvo bien, me lo tomé como una preparación intentando no quemarme ni ir a tope para poder seguir entrenando la semana siguiente.

Fue un día de mucho calor, con 36 grados a las 17h cuando empezaba, y la gente supongo que lo pagó, porque de casi 200 que tomamos la salida en el Half, hubo casi 60 abandonos.

La natación en el Pisuerga, de 1900m, a una sola vuelta yendo hasta una boya donde se hacía el giro de 180 grados para volver. Acabé en 38 minutos bastante entero.

En la T1 me encontré con Ramón que había salido unos segundos antes que yo del agua. Yo cogí un poco antes la bici, pero fui tranquilo al principio hasta que me cogió, y luego me situé a 10 metros detrás de él durante todo el recorrido en bici. La primera mitad, hasta Tordesillas, circuito muy llano y sin viento, sacamos una media de 33km/h. Desde Tordesillas hasta Valladolid, se volvía por otro lado, con algunas rampas más y algo de viento en contra, y bajamos la media, hasta conseguir una media global de 28km/h para los 86kms que me marcó el gps.

Ha sido la primera vez que salgo en la bici con las zapatillas puestas en la bici, sujetas con gomas al cuadro, y la cosa fue bien.

En la T2, nos cambiamos juntos Ramón y yo y salimos a correr. Fuimos juntos los primeros 5kms, pero él llevaba un ritmo menor, y yo ya tenía ganas de acabar, así que acabando la primera de las 4 vueltas que había que dar al circuito me adelanté.

La carrera es por el centro de Valladolid, llegando hasta la misma plaza mayor donde se hacía giro de 180 grados para volver por el mismo sitio hasta la cúpula del milenio, donde estaba la salida y la meta.

Finalmente saqué una media de 5:28min/kms, bebiendo mucho en todos los avituallamientos para controlar la deshidratación por el calor que hacía, aunque casi toda la carrera la hicimos ya sin sol.

Los avituallamientos de la carrera fueron muy completos, con agua, sales, geles, plátanos, aunque eché de menos que diesen el agua en botellines. Lo daban todo en vasos, lo cual se hace muy incómodo si quieres beber en marcha.

Magdalena nos estuvo animando en toda la carrera, y luego me esperó en meta.

Al final 5h 43min, en el puesto 97 de la general, de 141 finishers, y unos 52 abandonos.

Un puesto más que aceptable teniendo en cuenta que fui reservando en todo momento.